Atentados terroristas, secuestro, participación en la guerra, lucha armada, accidentes de tránsito, catástrofes ambientales, fallecimiento de seres queridos, maltrato físico y psicológico, pérdida de trabajo, cambios de residencia, trabajo o centro de educación, separación de la pareja, eventos complejos y menos complejos, pueden estar generando malestar físico y emocional, debido a que constituyen eventos traumáticos que pueden ser recientes o pasados, que no se logran superar solo con el paso del tiempo. En la mayoría de estas situaciones, las experiencias traumáticas determinan comportamientos y reacciones ante estímulos que han quedado como huella en nuestra memoria y que son evocados cada que se conectan internamente los estímulos pasados con los presentes y que puede estar acompañada de imágenes, sonidos, sabores, olores, sensaciones, sentimientos o emociones similares a las vividas. Es por esto que las consecuencias de haber pasado por episodios de esta índole ameritan ser tratados con las mejores herramientas disponibles en el campo de la psicología.
Existen situaciones como estas, que muy evidentemente se sabe que causan un daño grave en la conducta y hay otras que ante los ojos de otras personas no representan mucha importancia, por esto es que hay que tener en cuenta la perspectiva de la persona que ha vivido los sucesos, de una forma más objetiva y analítica, entendiendo su percepción y las consecuencias que estos eventos ha traído a su vida.
Para entender mejor, imagínate a una persona que tenía un local comercial en una ciudad pequeña y un día cualquiera, una persona de su entera confianza como de costumbre ofrece en altas horas de la noche un producto para su negocio, y este hace que su perro rabioso sea encerrado en una habitación, porque al parecer siente temor del perro y hace mucho ruido, sin prevención alguna la mujer encierra el perro, quedando absolutamente vulnerable ante la presencia, tocan a la puerta dos personas más, y estas ingresan a la fuerza con arma de fuego en mano, amordazan a la víctima, se llevan las cámaras de seguridad y casi desocupan el local comercial, mientras la victima con ojos cerrados es amenazada para que guarde silencio, la golpean y colocan un trapo en la boca que no la deja respirar y le dicen que la van a matar.
Leer artículo completo